A la hora de cultivar nuestros propios vegetales para consumirlos bien frescos en casa, la mesa de cultivo constituye una buena opción, en el caso que no dispongamos de un trozo de tierra para poder trabajarla.
Sin embargo el entusiasmo y las ganas deben de ser las mismas a la hora de trabajar en una mesa de cultivo.
Las ventajas que ofrece la mesa de cultivo son su total accesibilidad y la comodidad a la hora de trabajar, ya que puede colocarse a la altura ideal para estar de pie o sentado en un taburete mientras se realizan las labores típicas del huerto.
Por otro lado ofrece satisfactorias soluciones a la falta de espacio, e incluso se puede convertir en un magnifico objeto decorativo además de ofrecernos alimentos naturales y saludables.
Por cierto, a la mesa también se le pueden añadir unas ruedas, acordes con el tamaño de cada mesa, para facilitar el desplazamiento en caso que se necesite, ya que podemos ir buscando los lugares soleados o resguardarla en caso de climatología adversa.
Mesa de cultivo-invernadero Imagen: guíaverde.com |
Las ventajas que ofrece la mesa de cultivo son su total accesibilidad y la comodidad a la hora de trabajar, ya que puede colocarse a la altura ideal para estar de pie o sentado en un taburete mientras se realizan las labores típicas del huerto.
Por otro lado ofrece satisfactorias soluciones a la falta de espacio, e incluso se puede convertir en un magnifico objeto decorativo además de ofrecernos alimentos naturales y saludables.
Huerta en mesas de cultivo. Imagen: huertasbihotzabaratzeak |
En el mercado existen multitud de modelos y
posibilidades, por lo que, a la hora de adquirir una de estas mesas, se deben tener en cuenta los siguientes factores:
-Impermeabilidad o estanqueidad. Esto es muy importante a
la hora de donde vayamos a ubicar la mesa. No es lo mismo que la tengamos en
nuestro jardín, donde una mínima perdida de agua no es molesta, que la tengamos
en el balcón o terraza de un edificio comunitario y las pérdidas de agua puedan
ocasionar algún tipo de inconveniente al vecino de abajo.
Además con un 100% de estanqueidad el agua se aprovecha
mejor y se minimizan gastos.
-Estabilidad. Lógicamente a una mesa de cultivo debemos
pedirle un mínimo de estabilidad en sus patas ya que debe soportar el peso de
la tierra, plantas y agua de riego.
-Ligereza. La estabilidad para nada es incompatible
con la ligereza. Hoy en día existen materiales ligeros que dotan a las mesas de
gran estabilidad y son fáciles de manejar y transportar por una sola persona.
-Durabilidad. Esta característica también hace
referencia a los materiales de los que pueda estar hecha una mesa de cultivo.
Deben soportar las humedades y las inclemencias del tiempo. El aluminio o el
acero galvanizado pueden ser una buena opción.
-Suplementos. Que la mesa esté preparada para
poder añadir o completar la mesa de cultivo con otros elementos, como pueden
ser un toldo o un plástico tipo invernadero o incluso una estructura para guiar
las plantas en sentido vertical, puede resultar muy práctico.
A los que se decidan a empezar con un huerto
casero, muchas gracias y mucha suerte. Ánimo
Interesante la publicación. Gracias.
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